Entradas populares

jueves, 28 de junio de 2012

DIETA PARA PREVENIR LA ENFERMEDAD RENAL.

Las dietas ricas en frutas y verduras y  realizar ejercicio físico,  ayudan a prevenir la enfermedad renal, ya que esta implica un riesgo con los años, por lo que es fundamental una detección precoz, para prevenir el desarollo de insuficiencias renales, que en algunos de los casos, pueden requerir de diálisis.
La insuficiencia renal cursa de manera silenciosa y no se manifesta  hasta etapas muy avanzadas, por lo que preciso tomar precuaciones y tratar de controlar la dieta, para que no se presente síntomas de alteración del funcionamiemto del riñón.
Hay que decir que las personas hipertensas deben de poner especial cuidado y reducir el consumo de sal y controlar la ingesta de grasas que sólo ofrecen complicaciones al funcionamiento del organismo, por ello la dieta debe de ser rica en frutas y verduras y controlar equilibradamente las proteínas; prefireiendo las carnes blancas y el pescado  y utilizaraceitede oliva. Eliminar las carnes rojas evitar los lácteos ricos en grasas y sal
Enfermedades crónicas como la diabetesy la hipertensión arterial son los principales causas de la aparición de daño renal, así como son factores influyentes, los hombres mayores de 65 años y mujeres mayores de 55 años, tabaco y antecedentes familiares de enfermedad cardíaca, arterial om patología  renal.
La dieta debe de ser personalizada, acorde al sexo, a la edad y a la actvidad fíaica de cada persona, evitar especialmente el sedentarismo, que es uno de los principales causas que afectan al funcionamiento normal de los riñones y tratar las afecciones cardiovasculares, en caso de que las haya.
El propósito de esta dieta es mantener un equilibrio de electrólitos, minerales y líquido en pacientes que tengan enfermedad renal crónica o que estén con diálisis. Los pacientes que estén en diálisis necesitan esta dieta especial para reducir la acumulación de productos en su cuerpo. Estos productos de desecho también se pueden acumular entre los tratamientos de diálisis.
La mayoría de los pacientes de diálisis orinan muy poco o nada. Limitar los líquidos entre los tratamientos es muy importante. Sin la micción, el líquido se acumulará en el cuerpo y llevará a un exceso de éste en el corazón, los pulmones y los tobillos.

Recomendaciones

Solicite una remisión a un nutricionista certificado para recibir información con respecto a la alimentación acerca de la enfermedad renal. Algunos nutricionistas se especializan en dietas para el riñón. El nutricionista le puede ayudar a crear una dieta que se ajuste a sus necesidades.
La Kidney Foundation (Fundación para el Riñón) tiene capítulos en la mayoría de los estados (en los Estados Unidos). Es un recurso excelente para programas y materiales educativos con el fin de ayudar a las personas con enfermedad renal y sus familias.
Su ingesta de calorías diarias debe ser bastante alta para mantenerlo saludable y prevenir la descomposición del tejido corporal. Pregúntele al médico y al nutricionista sobre cuál debe ser su peso ideal y pésese usted mismo todas las mañanas.
CARBOHIDRATOS
Si usted tiene sobrepeso o padece diabetes, posiblemente necesite limitar la cantidad de carbohidratos que consume. Hable con su médico, enfermera o nutricionista.
Por otra parte, los carbohidratos son una buena fuente de energía para su cuerpo. Si su médico le ha recomendado una dieta baja en proteína, usted puede reemplazar las calorías de la proteína con:
  • Frutas, panes, granos y verduras. Estos alimentos suministran energía, al igual que fibra, minerales y vitaminas.
  • Los dulces duros, el azúcar, la miel y la jalea. De ser necesario, puede incluso comer postres ricos en calorías como tortas, pasteles o galletas, siempre y cuando limite los postres hechos de productos lácteos, chocolate, nueces o bananos.
GRASAS
Las grasas pueden ser una buena fuente de calorías. Asegúrese de usar grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas (aceite de oliva, aceite de canola, aceite de cártamo) para ayudar a proteger las arterias. Hable con su médico, enfermera o nutricionista acerca de las grasas y colesterol que pueden aumentar su riesgo de problemas cardíacos.

PROTEÍNA
Las dietas bajas en proteína pueden servir antes de empezar la diálisis. Su médico o nutricionista puede recomendar una dieta moderada en proteína (1 gramo de proteína por kilogramo de peso corporal al día).
Una vez que usted empiece la diálisis, necesitará comer más proteína. De hecho, se puede recomendar una dieta rica en proteína con pescado, aves de corral, carne de cerdo o huevos en cada comida. Esto ayudará a reponer los músculos y otros tejidos que usted pierde.
Las personas en tratamiento con diálisis deben comer de 8 a 10 onzas (220 a 280 gramos) de alimentos ricos en proteína cada día. Su médico, nutricionista o enfermera pueden sugerirle que agregue claras de huevo, claras de huevo en polvo o proteína en polvo.

CALCIO Y FÓSFORO
El calcio y el fósforo, otros dos minerales importantes en el cuerpo, también se vigilan con cuidado. Incluso en las fases iniciales de la enfermedad renal crónica, los niveles de fósforo en la sangre pueden resultar demasiado altos, lo cual puede causar:
  • Calcio bajo (esto provoca que el cuerpo extraiga el calcio de los huesos, lo cual puede llevar a que éstos sean más débiles y más susceptibles de romperse)
  • Picazón
Usted necesitará limitar la cantidad de alimentos lácteos que consume debido a que contienen grandes cantidades de fósforo. Esto incluye la leche, el yogur y el queso. Algunos alimentos lácteos son más bajos en fósforo, como la margarina blanda, la mantequilla, el queso crema, la crema de leche, el queso ricotta, el queso brie, el sorbete y capas de batido sin lácteos.
Las frutas y verduras contienen sólo cantidades pequeñas de fósforo, pero pueden contener grandes cantidades de potasio.
Usted posiblemente necesite tomar suplementos de calcio para prevenir la osteopatía, y vitamina D para controlar el equilibrio de calcio y fósforo en su cuerpo. Pregúntele al médico, la enfermera o el nutricionista.
Si los cambios en la dieta para bajar el fósforo no son suficientes, el médico puede recomendarle “fijadores de fósforo”.

LÍQUIDOS
En las fases iniciales de la enfermedad renal crónica, usted no necesita limitar la cantidad de líquido que bebe. A medida que su enfermedad renal empeore o cuando usted esté tratándose con diálisis, necesitará vigilar la cantidad de líquido que tome, ya que entre las sesiones de diálisis, éste se puede acumular en el cuerpo. Demasiado líquido llevará a dificultad para respirar, una urgencia que necesita atención médica inmediata.
El médico y la enfermera que realizan la diálisis le harán saber cuánto líquido debe tomar todos los días. No consuma demasiados alimentos que contengan mucha agua, como las sopas, la gelatina, las paletas de helado, el helado, las uvas, los melones, la lechuga, los tomates y el apio.
Use tazas o vasos más pequeños y entregue la taza después de haber terminado.
Las sugerencias para evitar estar sediento abarcan:
  • Evite los alimentos salados.
  • Congele un poco de jugo en una bandeja de cubos de hielo y consúmalo como un helado (usted debe contabilizar estos cubos de hielo en su cantidad diaria de líquidos).
  • Refrésquese en los días cálidos.
SAL O SODIO
El hecho de reducir el sodio en la alimentación le ayuda a usted a controlar la hipertensión arterial, evitar estar sediento e impedir que su cuerpo retenga líquido extra. Por lo regular, usted necesita una dieta baja en sal.
Busque estas palabras en las etiquetas de los alimentos:
  • Bajo en sodio
  • Sin sal agregada
  • Libre de sodio
  • Reducido en sodio
  • Sin sal
Verifique todas las etiquetas para ver cuánta sal o sodio contienen los alimentos por porción. Igualmente, evite alimentos en donde la sal esté encabezando la lista de ingredientes. Busque productos con menos de 100 mg de sal por porción.
No use sal al cocinar y aleje el salero de la mesa. La mayoría de las hierbas son seguras y usted puede usarlas para condimentar su alimento en lugar de la sal.
No utilice sustitutos de la sal debido a que contienen potasio. Las personas con enfermedad renal crónica también necesitan limitar la ingesta de potasio.

OTASIO
Los niveles sanguíneos normales de potasio ayudan a mantener constantes los latidos del corazón. Sin embargo, se puede acumular demasiado potasio cuando los riñones ya no funcionan bien y se pueden presentar ritmos cardíacos peligrosos, lo cual puede llevar a la muerte.
El potasio se encuentra en muchos grupos de alimentos, incluyendo las frutas y las verduras. Escoger el producto correcto de cada grupo de alimentos puede ayudar a controlar los niveles de potasio.
Al comer frutas:
  • Escoja melocotones, uvas, peras, cerezas, manzanas, moras, piña, ciruelas, mandarinas y sandía.
  • Limite o evite las naranjas y su jugo, las nectarinas, los kiwis, las uvas pasas u otra fruta deshidratada, los bananos (plátanos), el cantalupo, el melón dulce y las ciruelas.
Al comer verduras:
  • Escoja brócoli, repollo, zanahorias, coliflor, apio, pepino, berenjena, judías y habichuelas, lechuga, cebolla, pimentones, berro, calabacín y calabaza amarilla.
  • Limite o evite los espárragos, el aguacate, las papas (patatas), los tomates o la salsa de tomate, el cidrayote, la ahuyama y la espinaca cocida.
HIERRO
Los pacientes con insuficiencia renal avanzada también tienen anemia y por lo regular necesitan hierro extra.
Muchos alimentos contienen hierro extra (hígado, carne de res, carne de cerdo, pollo, fríjoles lima y porotos, cereales fortificados con hierro). Debido a su enfermedad renal, hable de esto con su médico, enfermera o nutricionista.


1 comentario:

  1. MUY INTERESANTE¡¡¡
    YA CON ESTA INFORMACION PODEMOS SALVARNOS DE ENTRAR EN ALGUNA ENFERMEDAD.....INFINITAS GRAX BRUNO DONAMORS POR EL INTERES A LOS LECTORES....ESTE CONOCIMIENTO NOS DA MAS HERRAMIENTAS ESPERO VER MAS
    BENDICIONES NAMASTE...

    ResponderEliminar